LO IMPORTANTE NO ES CÓMO EMPIEZA…

Nuria Pombo es la Presidenta de la Fundación Síndrome de West y es casi tan alta como yo, pero eso no facilitó que nuestro primer encuentro estuviera “a la altura” de lo que cada una esperaba de la otra…Afortunadamente hubo un segundo encuentro en el que aclaramos nuestros puntos de vista, y hoy un tercero en el que hemos compartido, además de coche, una mañana repleta de emociones y momentos inolvidables.

Juntas, pero no revueltas, hemos visitado cerca de medio millar de niños (18 clases) del Colegio Malvar en Arganda del Rey de entre 5 y 12 años. Este año todos ellos van a escribir cuentos para colaborar con la Fundación Síndrome de West, pues uno de sus compañeros, y también escritor, padece esta enfermedad.

Los alumnos de infantil nos han demostrado que les gusta mucho ayudar a los demás avisando al pirata Garrapata de la presencia del cocodrilo Danilo que quería asustarle. He perdido ya la cuenta de las veces que habré “montado este numerito” para este público tan exigente y nunca, nunca dejo de maravillarme de la magia que unas sencillas marionetas pueden llegar a obrar, especialmente en esta era digital en la que vivimos.

Otro cantar son los alumnos de primaria que, aunque todavía no han llegado a la adolescencia donde si pudieran pondrían a 2 revoluciones “cualquier charla que tuviera su origen en un adulto”, no se contentan con cualquier cosa para captar su atención. En este caso siempre guardo un as en la manga: el-poder-de-una-historia-accidentada. Una historia sobre “las aventuras y desventuras de mi hijo Marcos” que no me canso nunca de contar mientras  los ojos de los pequeños oyentes van abriéndose cada vez más y más, mientras aguantan la respiración hasta el desenlace final.

Pero esta mañana, además de narradora, también he sido oyente y he podido constatar una vez más cómo la vida “no es lo que te pasa” sino “cómo afrontas las cosas que te pasan”. Si CEN con C me tiene enganchada por algo es, entre otras cosas, por el poder de atracción que ejerce sobre personas con una historia de superación personal digna de ser contada y divulgada.

Y no, no solo es la historia de Nuria y su hijo Dani, es también la historia de otras 458 familias (y tantas otras) a las que la vida les ofrece platos que, no solo no habían pedido sino que, jamás pensaron que serían capaces de probar. Pues bien, estos padres y madres no solo acaban probándolos sino que terminan convirtiéndose en grandes expertos en su elaboración.

Nuria les contaba a los niños cómo actuar si alguna vez conocían a algún niño con el Síndrome de West porque en el fondo todos somos diferentes y a nadie le gusta sentirse como “un bicho raro” por, precisamente, esas diferencias.

La vida de Nuria y su marido no es fácil (que levante la mano quien no caiga en la queja aun teniendo el viento a favor) pero se sienten muy, muy, muy agradecidos por tener a Dani en sus vidas. Todo lo que Dani tiene de diferente le convierte, a ojos de quienes le conocen, en un ser especial capaz de dar unos abrazos que te dejan sin respiración y de vivir la vida con una intensidad que “quita el sentío”.

Sí, es cierto que Nuria no pidió que Dani viniera a este mundo con el Síndrome de West bajo el brazo…Nuria, como me contaba, tenía “otros planes” para él bien distintos. Ella, que quería ir a la playa y tenía todo preparado para disfrutar del sol y del mar, se encontró de pronto en mitad de la montaña. Pero la montaña tiene también su encanto y además, si, como ella, tienes el coraje y la fuerza de subir a la cima más alta y te pones de puntillas, acabas disfrutando de una preciosa vista del mar.

Gracias Nuria por tu gran labor desde la Fundación Síndrome de West y gracias también al Colegio Malvar que estoy segura de que acabará colaborando, además de escribiendo, también “a lo grande”. Ya lo decíamos nada más comenzar: lo importante no es cómo empieza…

IMAGINACIÓN: UN LENGUAJE UNIVERSAL

Si esta mañana al levantarme alguien me hubiera dicho que iba a conocer la existencia de “una teca, una chefonte, un rastufer y un lastineli”, probablemente le hubiera recordado que mi lengua materna es el español. Lo curioso es que estas palabras han sido inventadas por alumnos de 5º de primaria del CEIP Pinar Prados de Torrejón de la mano de Líquido, un Payaso de Hospital de Saniclown. Líquido ha llegado esta mañana por “la puerta de atrás” porque la principal era demasiado “normal”.

Estaba tan nervioso por eso de tener que enfrentarse al público más exigente (los niños) que antes de entrar se ha puesto a rezar…

¡Incluso su maletín parecía resistirse también a “entrar en el juego”!

Pero finalmente todo ha salido rodado y…un cuento nos hemos inventado.

Hemos comenzado con una cadena de palabras formada por palabras que nos venían a la mente según escuchábamos la que decía el compañero que teníamos al lado. Lo chulo de este juego es dejarse llevar y decir lo primero que se nos ocurra (aunque no exista) y no pensar una palabra de antemano y decirla independientemente de la que diga el compañero. Pero…Ah! Amigos… ¿Somos todos capaces de dejarnos llevar…?

Muchos de ellos, cuando Líquido les ha preguntado, han reconocido tener la palabra ya preparada porque, admitían, les daba seguridad. Cuánta magia, cuánta espontaneidad sacrificamos a cambio de “sentirnos seguros” a lo largo de nuestras vidas…

Pero Líquido, poco a poco ha ido metiendo a l@s chic@s en un mundo creado por su imaginación, les ha ido despojando, mediante el juego, de sus miedos e inseguridades y…de pronto ¡nos hemos encontrado todos en el espacio con casas y gatitos espaciales…!

Del espacio hemos regresado de nuevo a clase para, ya más relajados, jugar a las palabras encadenadas y quedarnos con algunas escogidas al azar que han dado pie a inventarnos entre todos un cuento de lo más “curioso e interesante” (mejor no entrar en más detalles no vaya a ser que a algún lector le dé un cortocircuito).

Y ya para acabar, Líquido ha dado paso a su otro personaje: Julián.

Julián les ha hablado de la labor que Líquido, junto con otr@s Payas@s de Hospital y gracias a Saniclown, realiza en las habitaciones de niñ@s que pasan mucho tiempo aburridos y que, gracias a estos “portales mágicos”, pueden olvidarse durante un tiempo de su enfermedad.

¡Qué suerte para los niños del CEIP Pinar Prados haber conocido a Líquido en un aula de un colegio y no en una habitación de hospital! Y… ¡qué suerte también para los niños hospitalizados que los Cuentos Escritos por los Niños del CEIP Pinar Prados con su Corazón contribuyan a llevar a Líquido (y a sus compañer@s de trabajo) hasta ellos!

Como veis, no hay nada como el TRABAJO EN EQUIPO para hacer de este mundo un lugar un poquito mejor. Hay quienes, como Líquido, aportan su talento como clown y otras, como Dina (una de las alumnas de 5º), aportan su talento como grandes ilustradoras:

No me extraña, visto lo visto, que tod@s l@s alumn@s de 5º quieran que sea Dina quien ilustre la portada de su libro solidario 🙂

La próxima semana dos visitas de sensibilización más… ¡no os las perdáis!

UNA MAÑANA “CON ÁNGEL”

Esta mañana ha sido un día de esos “con ángel”, de los que no sabes muy bien por qué, te levantas (a pesar de ser lunes, de tener que madrugar y tener un tiempo desapacible) con una energía especial que te invita a sacar lo mejor de ti misma…

Quizás el motivo era que iba de nuevo al CEIP Santo Ángel de la Guarda del que tan buen recuerdo guardaba del pasado curso cuando Jose, el profe de 6º, me llamó para decirme que tenía a dos chicas que no solo querían escribir el cuento del libro de la clase; si no que ¡¡estaban dispuestas a debutar como autoras en solitario…!!

Cosas así no ocurren todos los días. De Alejandra y Lucía que, por cierto, este año repiten de nuevo con su segundo libro como autoras en solitario, me llevé muuuucho más de lo que CEN con C les pudo brindar. Más que cuentos, tuve la sensación de estar maquetando y publicando “sus sueños” y eso, para quien lo haya vivido como yo sabe que no tiene precio.

Como tampoco tiene precio la compañía de Teresa, miembro de Aladina cuya causa solidaria ha sido elegida este curso por los alumnos de 6º del CEIP Santo Ángel a donde, como os contaba, nos dirigíamos esta mañana.

Teresa estudió derecho pero en lugar de defender los derechos de la ciudadanía en un juzgado, la vida le ha llevado a defender los derechos de los niños con cáncer. Y no solo le gusta lo que hace…realmente le apasiona. Si el lema de Aladina es:

“para que los niños con cáncer no pierdan nunca su sonrisa”,

el lema de Teresa esta mañana era:

“para que los niños de 6º aprendan con una sonrisa”

y…vaya si lo ha conseguido!!

Tras hacer una breve pero intensa lluvia de ideas sobre lo que era el cáncer y sus efectos sobre los niños,

todos los alumnos han escrito en un papel una frase representativa sobre lo escuchado…

Después un niño, elegido al azar, escogía uno de los papeles y, mediante la mímica, tenía que representar lo leído mientras que el resto de alumnos trataba de adivinarlo.

Con este juego hemos vivido la frustración del mimo al no hacerse comprender por su público (empatizando así con el sentimiento de un niño con cáncer cuando se siente “incomprendido” por lo que le está ocurriendo) que contrastaba con la algarabía del resto pugnando cada uno por dar su respuesta y la sonrisa del alumno que adivinaba la frase en cuestión. Creo que, de no haber puesto fin, todavía estaríamos allí sacando papeles para ser interpretados…

Para cerrar la visita Teresa le ha regalado a cada uno de los alumnos una pulsera de Aladina que han tardado muy poco en anudar a sus muñecas. Confiamos en que ese nudo anude fuertemente las ganas de estos niños escritores a las ganas de que

“los niños con cáncer no pierdan nunca su sonrisa”.

Y si “de sonrisas anda el juego”, no os perdáis la vista de este jueves al CEIP Pinar Prados de la mano de Saniclown!!

ARRANCAMOS CON… LIBROS CON MÚSICA PARA SALVAR VIDAS

Volver con las mismas ganas de siempre no siempre es fácil, pero parece que “la vida” se afana y se empeña en no ponérnoslo demasiado difícil…Eso sí, siempre y cuando la labor de “pico-pala” no decaiga en ningún momento… Ya se sabe “a Dios rogando…”

Este curso hemos cerrado filas con 13 colegios con casi medio centenar de clases detrás, 6 libros de niñ@s como autores en solitario y 1 libro de un padre que, por fin, se ha animado a darle visibilidad a su obra por una buena causa.

A lo largo de estos meses os iremos descubriendo a los grandes protagonistas de “este cuento” que estoy segura, no os dejarán indiferentes…

Nuestra primera protagonista se llama Elisabeth y ama la música desde que tiene uso de razón pero, como me contaba esta mañana, nunca tuvo talento musical. Así pues, tras varios años de trabajo en una oficina, comenzó a acumular una gran experiencia laboral en el mundo de la música ligada a la organización de eventos y conciertos, algo que sí se le daba realmente bien.

Hasta que en el año 2005, Andrea, la hija de unos amigos le habló de la existencia de un coro en un orfanato de Uganda y de la posibilidad de traerles a España para que dieran un concierto. Elisabeth les envió varios profesores con el fin de prepararles “algo” antes de traerlos. Tras dos meses y medio de trabajo intensivo ese “algo” acabó convirtiéndose en un “increíble pero cierto” pues la música y la danza corrían solas por las venas de esos chicos.

Elisabeth incumplió por primera vez una de sus reglas, la de contratar algo que todavía no había visto ni escuchado. Pero se dejó guiar por su intuición y los chicos dieron su primer concierto en la Estación de Atocha en Madrid. Tras el éxito de este concierto decidieron tocar en los trenes del metro ¡e incluso les cedieron el Palacio Real! Por supuesto todo esto dio mucho de qué hablar y Elisabeth fue entrevistada en la radio. CAUSAlmente Pilar, directora por aquel entonces de la Escuela Libre Micael, escuchó la entrevista y se puso en contacto con Elisabeth. El coro llegó a la Escuela y una madre preguntó si su hijo podía apadrinar a alguno de esos chicos. La respuesta no se hizo esperar. A este apadrinamiento le siguió el de la hermana del primer padrino y…cuando se quisieron dar cuenta ¡todos los chicos estaban apadrinados por familias de la Escuela!

Los chicos del coro volvieron al orfanato de Uganda y Elisabeth y su marido, que habían caído rendidos a sus pies totalmente enamorados de estos niños, se comprometieron a enviarles ayuda. Pero el dueño de aquel lugar decidió echar a la calles a todos los niños que habían viajado a España dejándoles de nuevo sin hogar. Aquel día fue un punto de inflexión en las vidas de Elisabeth y su marido. Afortunadamente contaban con el apoyo de las familias de la Escuela Libre Micael. Primero decidieron llevarles a colegios internos trayéndoles a España en los meses no lectivos pero pronto se dieron cuenta de que necesitaban dar un paso más y acabaron creando su propio hogar y sobretodo su propio proyecto: el de ayudar a estos chicos “hasta el final”; es decir, hasta que pueden valerse por sí mismos.

En todos estos años se han ido unos y han entrado otros, pero hoy unos cuantos, como Moses, vuelan ya con sus propias alas.

Moses llegó al hogar con 8 años y llevaba en la calle desde los 4. Nadie sabía de dónde venía. Moses solo sonreía, apenas hablaba y estaba loco por la música. Un día, cuando tenía 16 años, “la vida” quiso obrar uno de esos pequeños milagros… Moses fue a una iglesia atraído por su coro, no era la iglesia que frecuentaba pero la música que allí se escuchaba le encantaba. A la salida alguien le reconoció: era su madre. Y por fin la historia de Moses salió a la luz. A los 4 años el padre de Moses le alejó de su madre y se lo llevó a una casa con otra mujer y los hijos de ésta. Moses se escapó y se perdió por las calles de la gran ciudad sobreviviendo y vagando por ellas hasta que encontró “el hogar”. Hoy en día Moses es un joven alegre y simpático que lleva todo su carisma a su profesión de chef, aderezando todo lo que cocina con una buena dosis de música pues…la música es ese “alimento para el alma y para el corazón” capaz de SALVAR VIDAS.

Y colorín colorado este cuento solo ha comenzado…

Ahora les toca el turno a l@s alumn@s de 6º y 7º de la Escuela Libre Micael. Ellos escribirán cuentos para colaborar con MÚSICA PARA SALVAR VIDAS, el proyecto de Elisabeth y su marido, contribuyendo así al vuelo de otros chicos. Y no solo lo harán en grupo, tres de estos chicos: Salvador, Nora y Alba lo harán también con sus libros de AUTOR/A.

Como veis empezamos con “buen ritmo” 🙂

Antes de cerrar la entrada os dejo información sobre los próximos conciertos del grupo musical Aba Taano con 11 premios internacionales a sus espaldas, un plan familiar muy asequible que estoy segura no os dejará indiferentes…

http://www.abataano.com/es/proximos-conciertos/

Viernes 11 noviembre a las 19:00 horas

Auditorio Marcelino Camacho // C/Lope de Vega,40

Sábado 12 noviembre a las 19:00 horas

Sala Margarita Xirgú // Alcalá de Henares

Domingo 20 noviembre a las 12 horas

Casa de la Cultura // El Boalo

Domingo 27 noviembre a las 18:00 horas

Teatro Montalvo // Cercedilla